ESTAMOS PUBLICANDO AHORA LOS RELATOS DE: GÉNERO: "LIBRE"; TEMA: "EMPECEMOS JUNTOS".

ÓRDEN DE PUBLICACIÓN EN EL LATERAL DEL BLOG. DISFRUTAD DE LA LECTURA, AMIGOS.


miércoles, 28 de octubre de 2009

EL GENIO DE LOS SUEÑOS

Cada noche antes de acostarse el tímido Saúl emite un suspiro de tristeza. Mañana es su cumpleaños, ya va a llegar a la primera quincena, sin embargo, por sus compañeros ha sabido que en la fiesta de celebración de mañana no acudirá Marina, ya que según cuentan está saliendo con un tal Dani.

Se pone a escuchar temas de Tommy Dorsey en su mp3 mientras observa las estrellas. Las cuenta y se queda pensando. Según observa las estrellas se da cuenta de que hay una que se mueve, que se separa de las demás. No sólo eso, parece que se dirige hacía él. Saúl no sabe como reaccionar y se queda pasmado. La estrella móvil resulta ser una capsula redonda muy luminosa. Se posa en la repisa de la ventana lentamente. Se abre una pequeña puerta y de ahí emerge un ser diminuto. Es un personaje con un bigote blanco y una chistera violeta con una raya roja.

-Buenas Saúl! ¿Que te cuentas?-le saluda muy alegre.
-¿Tu quién eres...? ¿Y cómo sabes mi nombre?
-Yo lo sé todo! para eso soy Kiprin El genio de los sueños.-da un ligero salto.
-¿El genio de los sueños? ¿Y a que has venido?
-¿Como que ha que he venido? No me has llamado
-Que te he llamado?
-Sí, cada vez que alguien cuenta 521 estrellas yo acudo a su llamada y vengo en su ayuda.
-Pero si yo...
-Déjate de rollos que te conozco bacalao.-coge de la mano a Saúl-Ven nos adentraremos en los sueños de esa muchacha.

Y al instante se transportan al mundo onírico de Marina. Se encuentran en un frondoso bosque, lleno de animalillos y pajarillos que bailan y cantan. Cerca de ahí hay un lago donde unos patos nadan en fila, excepto uno de color azul que se separa del grupo. Más en lontananza se ve la sombra de una mujer de cabello largo bañándose en la orilla del lago. Parece que tiene compañía, pues alguien le ayuda a salir a la superficie.

Saúl y Kiprin miran a su alrededor. Es Saúl el que se percata de esa sombra entre tanto animalillo del bosque.

-Veo a alguien a lo lejos... no alcanzo a ver bien.
-Esto es un sueño. Así pues vayamos allá.

Y de un chasquido se trasladan a la otra orilla. Para asombro de Saúl la mujer de sus sueños está en compañía del hombre de sus sueños, de ella.

-Maldita sea!!-exclama cabreado Saúl-Como demonios voy a competir contra eso.
-No desesperes que estoy aquí para ayudarte.
-Dos contra uno no vale.
-Te digo que te relajes.
-Si al tontaina del Dani le añades que suspira por El Duque ¿qué opciones me queda?
-No olvides que hago magia en los sueños, por eso soy un genio.
-Pues ya lo estás convirtiendo en un paramecio.

Marina se percata de que Saúl está muy cerca ya que sus gritos han acaparado la atención de los animalillos del bosque.

-¿Qué haces aquí?-pregunta Marina
-Bueno, me pillaba de camino a casa...
-Buena respuesta-le dice sigilosamente Kiprin.
-¿Y tú que haces en este lugar?
-No sé, siempre suelo estar por aquí.

El Duque se acerca y la rodea con sus brazos. Saúl se pone a la defensiva y añade:

-¿Y ese que hace aquí?-le pregunta maliciosamente.
-Se llama Miguel Ángel y siempre está por aquí.
-Pero tu no estabas saliendo con ese tal Dani.
-Sí, pero este es mi sueño y sueño lo que me da la gana. Lo que me recuerda. Cómo es que estás en mis sueños.
-No sé tu sabrás...

Los pajarillos del bosque reanudan su canto. Ahora se ponen a interpretar a capella el tema de Glen Miller "Serenata a la luz de la luna". El cielo cambia de color y la Luna sale sonriente y le sugiere a Saúl que le invite a bailar.

-¿Aceptas este baile?
-No sé...
-Venga, esto es un sueño, no es real. No tienes nada de que avergonzarte.

Y en un instante se encuentran en un salón de baile. Marina con un vestido amarillo claro y con lazo del mismo color con el que se sujeta el pelo. Saúl pantalón negro con chaque azul marino y una camisa blanca. La Luna les observa a través de la ventana. Kiprin dirige la orquesta canora. Bailan de un lado a otra. El Duque que se da cuenta de que no tiene nada que hacer toma un taxi y se va.

Suenan las las doce de la media noche. La luna se echa las manos a la cabeza. Kiprin trata de avisar a Saúl pero no se da cuenta. Chasquea los dedos pero su magia no responde.

Última campanada. Suena el despertador. Hora de volver a clase. Saúl se despierta y se da cuenta que se quedó dormido contando estrellas.

Una vez que ya ha llegado a las clases, observa lejano a Marina que habla con unas amigas. Se acerca tímidamente. Lo ve llegar.

-¿Qué haces por aquí?
-Me pillaba de camino a clase.
-Buena respuesta.-le dice sigilosamente uno que pasa por ahí entre comedidas carcajadas.
-Y tu, que haces por aquí. No llegaras tarde...
-Siempre suelo estar por aquí. Ahora me voy para adentro.

De pronto un coche que pasa cerca del centro para para dejar a un alumno. Lleva puesta la música, es un forofo del Swing y el tema de Glen Miller suena.

-¿Qué hace ese aquí con la música a todo volumen?
-Es Miguelito, el hijo del profesor de música.-le responde ella.-Aunque no sé que hace por aquí. Lo expulsaron la semana pasada. Esto es muy extraño, creo que esto lo he soñado o algo así. Sólo falta que me invites a bailar.
-Pues es una buena idea... pero no le importara a Da... Dani.
-¿Quien?
-¿No estás saliendo con Dani?
-No! Es un pintamonas. Sólo le dí unos apuntes.

Saúl respira más tranquilo y se acerca a ella con la intención de que le conceda el baile mientras dure la música, pero lo que suena es el timbre de entrada a clase.

-¿Qué vas hacer luego?
-No sé... no tengo nada pensado- le responde ella mientras todos están entrando en clase.
-Si quieres podemos tomar un café o lo que sea después.
-Bueno, porque no.

En un pasillo desierto sólo quedan ellos dos, iluminados por el fluorescente parpadeante que el conserje aún no ha cambiado. Ambos se van a sus respectivas clases. Mientras el conductor del coche sonoro se transforma en Kiprin. A su alrededor unos pajarillos emprenden su vuelo al cual se une Kiprin. da un pequeño toque al sombrero y añade:
-¡Voila!

$MK

5 comentarios:

Calvarian dijo...

Bonita historia mágica. Que es sueño y que real...
Abrazox

Pedro Estudillo dijo...

¡Qué bueno! Convertir un sueño en realidad, eso sí que es auténtica magia.
Me ha gustado.

Un abrazo.

Julio dijo...

Me gusta, buen relato.
Un abrazo

Marinel dijo...

Maravilla de sueño hecho real,para deleite de protagonistas y lectores.
Besos.

Pilar dijo...

Sería estupendo que al contar 521 estrellas apareciera Kiprin e hiciese realidad nuestros sueños.
Habrá que probar!!!

Un bonito relato.

Besos.

Pilar